sábado, 25 de septiembre de 2010

La fiesta brava de la "Meche"







por:Füguamann/ Cronic-arte
25 de septiembre 2010


México D.F. Como cada año las calles de la Merced fueron territorio libre. El barrio donde se ubica uno de los centros de abastos de alimentos perecederos más importantes de la Ciudad de México, festejó el 53 aniversario del mercado que desde 1957 sustituyó la antigua plaza que a causa de la re configuración de la ciudad en los años 50 se vio desplazada por la construcción de lo que hoy se conoce como la avenida Anillo de Circunvalación.


Las calles se llenaron de la música popular que inconfundiblemente los “sonideros” desatan con la variedad de la música y los ritmos afro caribeños que, calle a calle retumban con los impresionantes sistemas de audio e iluminación que dan vida a una de las fiestas populares más emblemáticas la capital.

Allí cada cuadra toma sus propios tintes y ofrece una o varias caras. Están las de la fiesta y la algarabía que año con año intensifican por abarrotar las menudas callejuelas; pero también se avisan las que ensucian los festejos. Los atracos están a la orden del día, son hechos invisibles para la elementos policíacos que prefieren hacer de cuenta que nada pasa, aún cuando es inevitable toparse a cada paso con drogadicción, prostitución y robo.

Las calles estaban a reventar, la gente formaba una inmensa masa que se desplazaba a lo largo de toda la colonia. Avenidas cerradas y una inmensa cantidad de basura decoraban las banquetas. La gente, en su mayoría muchachos, se drogaba sin temor al castigo, en la Merced parece vivirse una tolerancia sobreentendida que permitía a los niños jugar mientras otroras partes se drogaban; marihuana, activo, “piedra” eran más fáciles de encontrar que un baño, por eso las calles se transformaron en el descanso de muchos.

Julián vive en la “Guerrero” y viene cada año, pero este fue diferente porque le “toco bailar”. En menos de medio minuto fue desprendido de sus pertenencias por cuatro “chavos” en plena avenida Circunvalación ante la mirada atónita de muchos qué, como yo, fuimos incapaces de poder hacer algo para ayudarlo.

Lejos quedaron los años en que las naves de la Merced eran espacios funcionales para la ciudad que en ese momento se encontraba en crecimiento. Ahora en cambio, se han tornado en zonas cercadas por el comercio informal y donde no existe ningún control sanitario y de calidad porque las ratas y cucarachas son los vecinos eternos de los colonos.

Para Javier que toda su vida la ha visto pasar entre los pasillos del mercado, la fiesta tiene muchos significados. “El toquín de la meche” es en primer lugar es un símbolo de identidad de quienes viven o trabajan ahí, pero también es un buen pretexto para compartir con la “banda” la música, el trago y un buen momento.

Aún cuando la muchos lo conocen por ahí, Javier no dudad en aclarar que se debe tener mucho cuidado, porque ese día a sus calles llega “banda” de otros barrios igual o más pesados. Tepito, Neza, Iztapalapa, Pantitlan son los más felicitados por el hombre que con su voz ameniza el sonido. Son los barrios que hoy son “carnales” y mañana enemigos.

Dos hombres ejecutan un baile soberbio sobre la calle, de fondo, un retumbar estrambótico que a todos hace mover los píes sincronizar los movimientos, que muchos bailarines de estudio y salón ya quisieran tener en su repertorio. El machismo hace oídos sordos porque los que mejor bailan son los gays que en su ritmo llevan lo mejor del sabor del latino y la fiesta popular.

Conforme la noche cae y la lluvia humedece las viejas construcciones, el ambiente se va poniendo más pesado. Las riñas se intensifican y es más fácil encontrar hombres sangrando que oficiales que estén dispuesto a detenerlo.

Este festín de color, tradición y contradicciones dura hasta la madrugada, cuando los corazones han terminado de derramar los sentimientos, las barrigas se han llenado hasta reventar y a la cabeza le urge descansar de todo cuanto haya sido capaz de procesar.#













1 comentario:

Anónimo dijo...

Me parecio en ves de una buena cronica un relato que lejos de estar cerca de la realidad, es carente de la verdad que se plasma e interpreta el dia de la merced o mejor dicho el festejo a la "Virgen de la Merced" y no es solo ese dia que se abarrota de basura, robos y prostitucion tu eres del df igual que yo y aunque no visites seguido suburbios como este, tienes que tener una nocion mas amplia de lo que pasa en nuestro querido pais y mas en la capital.

Te felicito por hacer mension de este dia pero tus comentarios son bastante fuera de la realidad de lo que se vive ese dia.

Para la otra mejor relata algo que no contraste la realidad ya que por este medio pueden leer tu mala informacion gente que lejos de interesarse por ver que se festeja ese dia, con lo que pones se asustaria y no es para tanto.

Me despido y saludos a mis tios espero que este comentario si te cale y cambies a bien ok.